Magistral… La dosis perfecta de luz en tiempos de cólera impuestos por Peña Nieto y llevados al límite con el resultado de las elecciones en Estados Unidos.
Su nombre: Tash Sultana.
Es así cuando llega un prodigio que logra cambiarnos el panorama, sonidos que humillan al pesimismo más crujiente y emblandecen nuestra psique, para despertarnos con su guitarra, su trompeta, su beat box, su voz, sus ojos… Toda tú, Tash, luz absoluta.
No habíamos visto a una mujer (de tan solo 21 años), ni hombre, ni bestia con un talento tan meticulosamente completo desde Mozart, ¡auto didacta tenías que ser! ¡Millenial!
De belleza andrógina, con un pasado oscuro como toda leyenda, sonrisa de oreja a oreja, mirada traviesa y un futuro que invita al escucha a seguir sus pasos sin descanso y rogar por más de Tash.
Un gran colega, maduro pero carismáticamente inmaduro y un servidor creemos fervientemente en mantenernos atentos al gusto teen, vampirismo popero aunque Tash no necesita un género, llegué a ella a través de mi joven prima quien publicó un JAM de Tash, sola y su grandiosa alma, encendida in crescendo hasta explotar…
Eso es la verdadera música, debe mover y Tash, reitero, explota.
Tash Sultana es honesta y completamente vulnerable ante su extraorbitante presencia en nuestro planeta, su música se puede escuchar directamente en Spotify, Itunes y sobre todo recomiendo ver TODOS los videos que se puedan encontrar en youtube.
twitter.com/PrisPomeroy